Espectro y otros relatos sobrenaturales

La inusual imaginación de este maestro del género fantástico nos vuelve a dar una docena de cuentos breves. Con la temática de terror nos ofrece: "El espectro", "La isla del infierno", "El ataúd", "El juguete de Clarence", y "El monstruo de Kentucky". La ciencia ficción se nos muestra en: "La otra dimensión", "La aparición", "La casamata", "El hombre que cayó del cielo" y "La bomba atómica". Horror psicológico en "Seguros Plazo Cumplido". Y por último "El hombre que corre", que trata sobre su tema favorito, que tan bien ha reflejado en sus novelas: el tránsito entre la vida y la muerte. Pero todos ellos envueltos con el tan característico halo sobrecogedor y sobrenatural que los hacen únicos.

El estilo es como en toda su producción muy directo, sin artificios, conjugando perfectamente la narración y el diálogo, y siempre dando la intriga justa para acabar sorprendiendo con unos finales inesperados, sorpresivos y muchas veces angustiosos. En resumen, otro puñado de joyas a engrosar a sus más de un centenar de cuentos que desafían la razón humana y nos llevan a mundos inexplorados.


Antonio Arrarás (Donostia-San Sebastián, 1958) es un escritor de relatos breves y novelas. Ha publicado en nuestra editorial, con este que ahora presentamos, diez libros propios, amén de varias colaboraciones en diversas antologías. Es El Espectro y otros relatos sobrenaturales el sexto libro de historias cortas, antes lo fueron Peña y otros relatos extraños y La Cara Oculta del Bosque, publicados en su ciudad en la editorial Txertoa, y en esta Biblioteca del Laberinto La Transformación y otros relatos de terror,
El Monstruo Volador y otros seres extraños y Temor a la vida y otros relatos de miedo. Siempre fiel a sus géneros favoritos, fantasía y terror, nos asegura: "Tengo en mente hacer una tercera y última entrega de El Monstruo Volador, que tanto han alabado mis agradecidos lectores". Nos consta que lo hará, porque según dijo en una de sus últimas entrevistas: "No concibo un día sin escribir algo, ni tampoco sin preguntarme cuál es el propósito de la Creación".